Por Gabriel Sghirla
El Clásico del Astillero empezó como toda una fiesta por el color que le puso la hinchada de Emelec al llenar el George Capwell mientras atraviesa uno de los moemntos más complciados de su historia. Tras estos hechos, el club publicó un comunicado donde rechaza categóricamente los actos de violencia que se produjeron, pero a la vez agradeció por la pasión que mostraron durante la Explosión Azul.
La "Explosión Azul", el evento de presentación de Club Sport Emelec, debía ser una fiesta del fútbol, un espectáculo para celebrar el inicio de una nueva temporada. Sin embargo, lo que ocurrió en el estadio Capwell dejó un sabor amargo y una gran preocupación sobre la seguridad en los estadios ecuatorianos.
La introducción de objetos peligrosos, como botellas, bengalas y otros elementos pirotécnicos, es una clara muestra de que los controles de seguridad en el estadio Capwell fueron insuficientes. Estos objetos, que pudieron haber causado graves daños a los jugadores de Barcelona SC, no debieron ingresar al estadio.
La responsabilidad de garantizar la seguridad en los eventos deportivos recae en gran medida en los organizadores, en este caso, el Club Sport Emelec. Es inaceptable que se haya permitido el ingreso de objetos que ponen en riesgo la integridad física de los jugadores y de los aficionados.
La falta de control en la "Explosión Azul" podría acarrear graves consecuencias para Emelec. La Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) podría imponer sanciones económicas y deportivas al club, e incluso clausurar el estadio Capwell.
Pero más allá de las sanciones, lo más preocupante es el riesgo que corrieron los jugadores de Barcelona SC. Si alguno de los objetos lanzados al campo de juego hubiera impactado en un jugador, las consecuencias podrían haber sido fatales.
Es urgente que se tomen medidas para evitar que este tipo de incidentes se repitan en el futuro. Se deben revisar y reforzar los protocolos de seguridad en los estadios, capacitar al personal encargado de los controles de acceso y utilizar tecnología para detectar objetos peligrosos.
Además, es fundamental que se identifique y sancione a los responsables de introducir objetos peligrosos en el estadio. No podemos permitir que unos pocos inadaptados pongan en riesgo la seguridad de los demás.
Los incidentes ocurridos en la "Explosión Azul" proyectan una imagen negativa del fútbol ecuatoriano. Este tipo de actos de violencia alejan a los aficionados de los estadios y perjudican el desarrollo del deporte en nuestro país.
Es hora de que todos los actores del fútbol ecuatoriano, desde los dirigentes hasta los hinchas, tomemos conciencia de la importancia de erradicar la violencia de los estadios. El fútbol debe ser una fiesta, un espacio de convivencia y sana competencia.
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
12/02/2025
11/02/2025